El gas natural, como servicio público esencial, ha desempeñado un papel crucial en la transformación social y económica del país, ofreciendo un acceso democratizado capaz de mejorar la calidad de vida de más de 36 millones de ciudadanos colombianos (12 millones de hogares de Colombia), y, de acuerdo con datos del Ministerio de Minas y Energía, alcanzó más de 413.243 nuevos usuarios residenciales conectados al cierre de 2023.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Calidad de Vida 2023, publicada por el DANE, revela que el 69 % de los hogares cocinan con gas natural, mientras que el 8,7 % de la población (1.560.000 hogares) aún sigue cocinando sus alimentos con leña, cocinol, entre otros materiales contaminantes e ineficientes.
Esta última cifra mantiene el insistente llamado de la industria del gas natural de mantener la seguridad energética para ampliar la masificación de este servicio con el fin de sustituir materiales contaminantes para la cocción de alimentos.
“Al conectar a más hogares a la red de gas natural, estamos mejorando la calidad de vida de millones de colombianos, especialmente la de aquellos en situación de vulnerabilidad. Por esta razón, la sustitución de combustibles altamente contaminantes como la leña para cocción, debe ser prioridad en la agenda de nacional y el gas natural tiene la capacidad de reducir pobreza energética y promover la transición de los hogares”, señaló Luz Stella Murgas, presidenta de Naturgas.
Estudios realizados por la Agencia Internacional de Energía (IEA), evidencia que una de cada tres personas, principalmente en las regiones más pobres del mundo, aún carece de acceso a instalaciones de cocina limpias, lo que repercute en millones de muertes prematuras anuales, debido a la inhalación de humo de fogatas abiertas o estufas de leña, lo que impacta directamente a mujeres y niños en hogares.
Además, resalta el rol del gas natural como servicio público para impulsar la transición hacia cocinas más limpias, como una estrategia efectiva para mejorar la calidad de vida de las personas, reducir las emisiones de carbono promoviendo un entorno más seguro y saludable para las comunidades, y ayuda a mejorar la economía de las poblaciones más vulnerables.
Un ejemplo de su impacto en las comunidades se ha registrado en veredas de los departamentos del Eje Cafetero, donde las comunidades aún cocinaban con leña.
Según Naturgas, con a la gestión de la compañía distribuidora Efigas, a la fecha, 24% de los beneficiarios (1.287 familias campesinas), han transformado su vida por la conexión de gas natural en sus territorios.
De acuerdo con German Murillo, habitante y líder de la vereda Pueblo Viejo, aledaña al municipio de Neira (Caldas), “el gas natural genera un impacto muy positivo, es un respiro para todos nosotros, porque dejamos de estar en el monte cortando palos y maltratando la naturaleza para cocinar”.
Otra habitante de la zona, Marta Lucía Cárdenas, agregó: “las 84 familias de Pueblo Viejo disfrutaremos de este servicio y nos ahorraremos gastos y tiempo. Este proyecto fue muy esperado por toda la vereda, es una alegría tenerlo».
De acuerdo con el gremio, los 36 millones de colombianos que hoy cocinan con gas natural necesitan mantener la disponibilidad de este energético que la industria entrega a los usuarios. «Colombia necesita con urgencia más acceso a este servicio público, el más económico de los servicios básicos, y que ha permitido a otros países desarrollarse y disminuir la pobreza energética».
Naturgas recordó que el gas natural es un recurso de bajas emisiones, económico, que dignifica la vida de quienes históricamente han estado más olvidados y excluidos.