El gas natural vehicular (GNV) es un combustible alternativo a la gasolina, más limpio y económico. Se diferencia del gas natural doméstico en su presentación, pues precisa un tratamiento específico que permite la utilización y almacenamiento seguro en los automotores.
El GNV está formado por una mezcla de hidrocarburos como lo es el metano. La presión aumenta a través de un proceso de compresión y posteriormente se almacena en los respectivos recipientes cilíndricos de alta resistencia para ser usado como un combustible vehicular.
¿Cómo funciona el gas natural vehicular?
El GNV se quema en los cilindros de un motor de combustión del mismo modo que se quema la gasolina, lo cual produce energía calorífica que permite el funcionamiento del motor. Un mismo vehículo puede consumir gasolina y GNV alternativamente; solo necesita la implementación de tanques de GNV, los conductos y válvulas precisas para llevar el gas al motor.
La carga de los tanques de gas natural vehicular se realiza del mismo modo que se abastece la gasolina. El vehículo será alimentado en las estaciones disponibles.
¿Por qué es importante el uso del gas natural vehicular?
Cabe plantearse qué motivos y argumentos existen en torno a la importancia de implementar el uso de energías limpias en la movilidad. A finales de 2020, la revista médica especializada The Lancet entregó su informe sobre calidad del aire en la India. En este país, alrededor de 1,7 millones de muertes en 2019 estuvieron relacionadas con la polución, lo que se tradujo en pérdidas para su economía de 36.800 millones de dólares, un 1,36 % de su PIB.
Para poner en contexto la cifra de decesos: El COVID cerró 2020 con 1,8 millones de muertos en todo el planeta.
Usar gas natural vehicular es importante porque tiene disminuciones cercanas al 100% de material particulado fino y óxido de azufre. También reduce alrededor del 75% de las emisiones de óxidos de nitrógeno y entre el 30% al 50% de dióxido de carbono, frente a las generadas por un vehículo impulsado por diésel.
Además, el gas natural vehicular es una tecnología probada a nivel mundial. Así lo demuestran casos como el de Corea, con más de 30.000 buses; EE. UU., con más de 20.000 buses; Nueva Delhi (India), con más de 11.000 vehículos; China, con más de 10.000; España con más de 1.000, y Lima (Perú), con 600 buses de diferentes tipologías
En Colombia, ciudades como Bogotá, Barranquilla, Cartagena, Manizales, Medellín y Palmira han reconocido las bondades del GNV para el transporte público de pasajeros y han hecho apuestas para incentivar este cambio tecnológico. Ya operan alrededor de 2.000 buses dedicados a GNV en el país.
Estudios recientes de la Universidad de los Andes para Transmilenio y Ecopetrol demostraron que con solo la sustitución de 350 buses de los 1.441 adjudicados para el sistema troncal de Transmilenio con bajas emisiones se redujo en un 50% la presencia de material particulado en el ambiente al interior de las estaciones y buses del sistema, lo que demuestra la eficacia de las nuevas tecnologías con el mejoramiento de la calidad del aire.
¿Cuáles son los beneficios del gas natural vehicular?
Ahorro económico
Es amigable con el medio ambiente
Mejora la vida útil del motor
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