La planta de hidrógeno verde de Lloseta ya ha comenzado a funcionar gracias a la energía suministrada de dos instalaciones de placas solares en el propio municipio y también en Petra. Hay que recordar que el proyecto, con un coste de 50 millones de euros, se puso en marcha durante la pasada legislatura y se paralizó por un problema en la serie de producción y que ahora ya se ha solucionado.
Dos plantas de un total de 25 hectáreas proporcionan energía totalmente limpia a esta planta de hidrógeno que es capaz de producir hasta 300 toneladas de este combustible catalogado como verde, al no emitir gases nocivos durante su proceso. Equivaldría a producir 900 toneladas de gasolina cada año, que vendría a ser el consumo en carburante de 485 vuelos entre Palma y Barcelona.
Como decimos, ha estado dos años sin funcionar por un fallo en la fabricación en los suministros de la maquinaria y que ahora ya se ha solventado.
Entre los diferentes usos que se plantea: inyectar hidrógeno en el suministro de gas natural, transportarlo mediante camiones para utilizarlo en un hotel en la Playa de Palma con pila de hidrógeno, en el puerto de la capital balear para ferries, y también para autobuses de la EMT. Hay que tener en cuenta que la inyección de hidrógeno, concretamente un 2 por ciento, en la red de gas natural de Mallorca es un proceso pionero en toda España.
Sebastià Barceló, gerente de Power to Green Hydrogen Mallorca, reconoce que se trata de un tipo de producción de energía que se emplea agua. En este caso, la planta de Lloseta tendría un consumo anual, si funcionase a pleno rendimiento, equivalente a llenar 5 piscinas olímpicas.