Los mercados globales de gas natural seguirán tensos este año, ya que la demanda aumenta y la producción crece más lentamente que antes de la crisis energética de 2022 y la pandemia de 2020-2021, según un informe trimestral de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) publicado el martes.
POR QUÉ ES IMPORTANTE
La volatilidad de los precios del gas se ha visto avivada por factores políticos, como la incertidumbre en torno a las políticas energéticas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y la posible interrupción de los suministros de Oriente Próximo.
Aunque la interrupción del suministro de gasoductos rusos al este de Europa a través de Ucrania el 1 de enero aún no ha provocado un déficit para la Unión Europea, el clima frío significa que Europa está lista para terminar la temporada de invierno con existencias de gas por debajo de la media, lo que aumenta la demanda de gas natural licuado (GNL) global.
CONTEXTO
La demanda de gas, especialmente en Europa, cayó en 2022-2023, ya que los precios se dispararon tras la invasión rusa de Ucrania y las medidas de la UE para reducir el consumo frenaron el uso de suministros rusos.
El año pasado, la demanda mundial de gas creció un 2,8%, es decir, 115.000 millones de metros cúbicos (bcm), frente a la tasa media de crecimiento del 2% entre 2010 y 2020.
Al mismo tiempo, la producción de gas natural licuado (GNL) creció por debajo de la tasa media, según el informe de la AIE.
La región Asia-Pacífico representó casi el 45% de la demanda incremental de gas en 2024 debido al crecimiento económico.
CITA CLAVE
“Los factores fundamentales del mercado del gas han mejorado en el último año, pero por ahora seguimos observando una importante escasez debido al aumento de la demanda y al escaso crecimiento de la capacidad de GNL. El aumento de la incertidumbre geopolítica agrava los riesgos”, afirmó Keisuke Sadamori, director de mercados energéticos y seguridad de la AIE.
Fuente: reuters.com
