Foto: Naturgas
Solicitó preservar las señales de precios, las reglas de contratación y la flexibilización de las condiciones.
En el marco del Foro Regulatorio Internacional 2025 la presidenta de Naturgas, Luz Stella Murgas se pronunció acerca de la situación por la que atraviesa el gas en la actualidad en Colombia, con lo que la dirigente gremial aseveró que el problema del país es la falta de la toma de decisiones.
“Pero sin decisiones oportunas, ese potencial seguirá enterrado. Colombia no tiene un problema de recursos, sino de decisiones. La única forma de aumentar reservas es explorando, y la exploración requiere estabilidad regulatoria, licencias oportunas y condiciones de inversión claras”, mencionó Murgas.
Con lo que señaló que para continuar aportando al bienestar de los colombianos y al desarrollo nacional, es indispensable que la regulación mantenga y fortalezca las señales de inversión de largo plazo, brindando confianza a los inversionistas. Este aspecto es crítico para la ejecución de las inversiones en infraestructura de abastecimiento y transporte que el país requiere con urgencia.
¿Cuáles son las prioridades?
En su discurso la presidenta de Naturgas aseguró que, en el ámbito de la comercialización mayorista, se deben atender tres frentes prioritarios para lograr apaciguar la situación.
Con lo anterior, resaltó que lo primero es preservar las señales de precios que incentiven el desarrollo de nuevos proyectos de oferta de gas, tanto local como importado.
Un segundo punto es ajustar las reglas de contratación para permitir una mayor flexibilidad en los contratos de gas importado de largo plazo.
Y un tercer punto es flexibilizar las condiciones regulatorias que permitan mejorar la competitividad del gas natural en sectores altamente sensibles al precio, como el Gas Natural Comprimido Vehicular y el sector industrial, los cuales son esenciales para la sostenibilidad de toda la cadena. La regulación no solo es una herramienta técnica, sino también tiene la capacidad de convertirse en un motor de transformación de las economías de los países. El trabajo articulado entre Gobierno, empresas y demás actores aquí presentes, con una visión a corto y mediano plazo, priorizará a los usuarios, la competitividad de los mercados, la seguridad energética y la sostenibilidad.
‘La transición energética no es un eslogan; es una tarea colectiva’
En su discurso, la experta en el sector resaltó que el país si deberá tener una transición energética, sin embargo, advirtió que no es un eslogan; es una tarea colectiva que requiere decisiones técnicas, reglas estables y visión de largo plazo.
“El gas natural es y seguirá siendo el puente entre la energía del presente y la energía del futuro”, señaló Murgas.
De acuerdo con el World Energy Outlook 2024, publicado por la Agencia Internacional de Energía, los países que avanzan hacia matrices más limpias necesitan fuentes confiables y flexibles, y el gas cumple ese rol. Colombia puede aprovechar su posición privilegiada para ser un modelo regional, una nación con matriz limpia, seguridad energética y precios competitivos.
Ante esto señaló que para lograrlo se deben resolver problemas estructurales como las demoras en consultas previas, licencias ambientales oportunas, y la ausencia de consensos nacionales en las que el interés general prime sobre el particular.
“Esta industria ha priorizado los proyectos estratégicos, pero hay que destrabarlos y acelerar su ejecución. El problema de Colombia no es de recursos, es de coordinación”, agregó.
Además, planteó que urge crear un mecanismo efectivo para acelerar la ejecución de proyectos energéticos estratégicos, especialmente los de costa afuera como Sirius o los continentales con potencial para ser producidos con para ser producidos con fracking seguro y sostenible, que podría aumentar las reservas probadas y asegurar la autosuficiencia energética de los colombianos.
“Explorar nuevas áreas de manera sostenible, con los más altos estándares internacionales, no es una opción: es una obligación si queremos garantizar que las industrias, los hogares y el transporte sigan funcionando con energía más limpia, confiable y competitiva”, resaltó.
A su vez, reveló que es fundamental que la política pública impulse la actividad exploratoria y de producción de gas natural, con el fin de tener más gas natural para garantizar seguridad y soberanía energética, sin tener que depender en ninguna porción de la importación de gas natural de otros países.
En 2024, la industria del gas natural aportó $3,3 billones en impuestos y regalías, un incremento del 13% frente a 2023, y equivalentes al 0,19% del PIB nacional. Además, invirtió 817 millones de dólares, de los cuales el 90% se destinó a exploración y producción, y se proyecta un crecimiento del 38% en 2025, alcanzando US$1.129 millones.
Dentro de los llamados que realizó, hubo uno enfocado principalmente a los reguladores con el fin de que se entreguen incentivos y señales económicas que permitan garantizar el abastecimiento de gas a través de fuentes locales y externas en condiciones competitivas.
“Hay que adecuar la contratación a estándares internacionales para facilitar la importación, incentivar la inversión en exploración para fuentes locales, y promover la autorregulación responsable de los agentes del mercado. La calidad regulatoria, como lo plantea la OCDE, se mide no solo por la norma, sino por su capacidad de generar confianza, estabilidad y equidad. Ese es el tipo de regulación que necesitamos para proteger a los usuarios y fortalecer la seguridad energética del país”, señaló la dirigente gremial.
Y para el sector envió una reflexión: “¡Colombia está parada sobre gas natural!. No aprovecharlo sería un error histórico”.
Mencionó que el país tiene el recurso, la tecnología y el deber de desarrollarlo para garantizar bienestar, equidad y seguridad para todos los colombianos. Porque es proteger el bolsillo de los colombianos, es cuidar el medio ambiente y garantizar un futuro sostenible para todos.
LEIDY JULIETH RUIZ CLAVIJO
Periodista de Portafolio
Fuente: Portafolio








