El uso de energías más limpias en la industria del transporte es vital para contrarrestar las crecientes preocupaciones medioambientales. Una de las alternativas que ha ganado terreno en los últimos años es el Gas Natural Vehicular (GNV). Veamos cómo este combustible está revolucionando la manera en que vemos y usamos nuestros vehículos y cómo contribuye a un planeta más limpio.
- Un respiro para el planeta
El gas natural, en comparación con otros combustibles fósiles, tiene un contenido de carbono considerablemente menor. Al quemarse, produce menos dióxido de carbono (CO2), el cual es el principal gas de efecto invernadero responsable del cambio climático. Esto significa que, al optar por vehículos que utilizan GNV, estamos contribuyendo directamente a la reducción de las emisiones globales de gases de efecto invernadero.
- Mejor calidad del aire
Además del CO2, los vehículos tradicionales emiten una serie de contaminantes nocivos como óxidos de nitrógeno, partículas y compuestos orgánicos volátiles. El GNV, en cambio, emite cantidades significativamente menores de estos contaminantes. En cuento a óxidos de nitrógeno reduce las emisiones en un 75 % y en material particulado hasta un 99 % menos. El resultado es un aire más limpio en nuestras ciudades. Esto no solo mejora la visibilidad, sino que también hace que el aire sea más saludable para respirar.
- Reducción de enfermedades respiratorias
La calidad del aire tiene un impacto directo en nuestra salud. Se estima que la contaminación del aire es responsable de más de 6,7 millones de muertes prematuras en todo el mundo cada año. Muchos de estos fallecimientos están relacionados con enfermedades respiratorias como el asma, bronquitis y enfermedades pulmonares obstructivas crónicas.
Al reducir la cantidad de contaminantes en el aire, el GNV contribuye a una atmósfera más saludable. Menos contaminación significa menos partículas irritantes en el aire que respiramos, lo que a su vez conduce a una reducción en la prevalencia y gravedad de las enfermedades respiratorias.
- Economía y eficiencia
No podemos pasar por alto que el GNV es, en muchos lugares, una opción más económica que la gasolina o el diésel que puede llegar a ser de hasta el 50 % menos. Su combustión es más eficiente y, en muchos países, los impuestos sobre el GNV son más bajos, lo que lo convierte en una opción atractiva desde el punto de vista económico.
En Colombia, para el primer semestre del año 2023, se realizaron 10.304 conversiones de vehículos a Gas Natural Vehicular, un 31 % más de lo realizado en el mismo periodo en el año 2022.
Para la industria del gas natural en el país, este crecimiento confirma los beneficios en economía y eficiencia que están percibiendo los usuarios del gas natural. A hoy, este energético ha alcanzado más de 645.000 conversiones exitosas de vehículos, sin mencionar las más de 4.500 unidades de vehículos nuevos dedicados a gas natural que han entrado al país para contribuir en la descarbonización, especialmente en el segmento de carga pesada y transporte público de pasajeros.
El Gas Natural Vehicular es una solución tangible y viable para abordar algunos de los problemas medioambientales y de salud más urgentes de nuestra era. Al optar por el GNV, no solo estamos tomando una decisión inteligente para nuestros bolsillos, sino también para el planeta y para nuestra salud.
